Cada vez son más los campos en los que se puede aplicar el trabajo como piloto de drones. Gracias a la modernización de los sistemas agrarios y al incremento de la automatización de los procesos de cultivo, surgen aplicaciones profesionales como la de Extinción de Plagas con drones.
Hoy te contamos cómo se puede aplicar una profesión tan en boga como la de piloto de dron, en el desempeño de combatir la expansión de plagas en el mundo rural como la de la Avispilla Asiática: el depredador que amenaza la biodiversidad de nuestros ecosistemas porque tiene como presa preferencial, la abeja de la miel.
Por lo tanto, fomentar la formación especializada en drones para labores de este tipo se vuelve imprescindible si queremos dedicar nuestro futuro al tratamiento y erradicación de plagas medioambientales.
Se la considera como la asesina de la biodiversidad, siendo hoy en día, uno de los grandes enemigos no solo de los agricultores, sino también de las propias instituciones. Cada vez más regiones de España sufren sus efectos devastadores y su control trae de cabeza a las diferentes Comunidades Autónomas. Sin embargo, en la formación en drones en Málaga contra plagas, puede existir la solución tanto para su control como para su erradicación.
La avispa asiática (Vespa velutina nigrithorax) es originaria del sureste del continente asiático y entró en 2004 en Europa a través del puerto de Burdeos. En menos de diez años, se extendió hasta la mitad del territorio galo. En España, se detectó por primera vez en Guipúzcoa en 2010. Desde allí ha continuado su avance imparable por todo el norte llegando a Galicia e incluso Portugal. Pero no solo ahí, Cataluña, Aragón, La Rioja, Castilla y León y más recientemente Baleares ya han sufrido sus efectos.
Los drones contra plagas se afianzan como una solución efectiva y práctica en la lucha contra este tipo de visitantes. De hecho, una formación especializada en drones en Málaga contra plagas puede ayudar sobremanera al ecosistema, amén de la especialización de los propios profesionales.
Un proyecto nacido en el País Vasco vuelve a poner de relevancia la importancia de los drones contra las plagas. Esta avispa asiática que se expande rápidamente, podría tener los días contados gracias a los drones.
El objetivo es que los drones ataquen los nidos de estas avispas aplicando poliuretano. Un veneno que acaba de forma fulminantemente con estos depredadores. Cabe destacar que la avispa asiática es capaz de atacar cada día entre 25 y 50 abejas productoras de miel, algo que ha puesto en alerta a apicultores de toda España. Y no solo a éstos, por la merma en la producción de este producto, sino porque las abejas son esenciales para el equilibrio de todos los ecosistemas del planeta por su importantísima función polinizadora.
La formación en drones contra plagas ayuda a que casos como estos no proliferen y se expandan más de la cuenta, con el consiguiente perjuicio para productores e instituciones y, más grave aún, causando un grave desequilibrio en la biodiversidad.
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E-ATO 190
